Hoy conocí el #ChaProyectoSelfie de Charlene Arian y me
conmovió profundamente, tocó mi alma y me movió a hacer algo más por mí misma.
Quiero hablar de mí y no por egoísmo, sino porque hace poco
aprendí que sólo debo hablar de lo que siento, de lo que pienso, de lo que
hago, de lo que sueño. Porque aunque crea conocer a las personas que están
conmigo en realidad no vivo dentro de su piel para saber lo que ellos sienten,
lo que piensan, lo que sueñan.
Llevo semanas sintiéndome devastada. Claro que no tenía una
vida de cuento de hadas, pero tampoco la quise nunca. En cambio, lo que tenía me
hacía feliz. Lo que no me di cuenta es que esa felicidad estaba basada en
creencias que desde muy pequeña adopté como propias y que nunca me atreví a
cuestionar. Desde el subconsciente repliqué en mi vida situaciones que juré que
no quería vivir; sin embargo, al no haberlas sanado, la vida misma me las
volvió a poner de frente. Me seguí negando a ver esos patrones conductuales
hasta que me hicieron verlos de la manera más dolorosa.
Hoy he decidido dejar mi dolor atrás. Estoy convencida que necesito
reinventarme, reconocerme en el espejo y decirme a mí misma “Me disculpo por no haberte conocido antes.
Te prometo que no te vuelvo a dejar de querer.”
Si no sabes qué es el Proyecto Selfie de Cha, te invito a
verlo aquí.
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